La expropiación fue perdiendo fuerza a raíz de un cumulo de malas decisiones. Fernandez ha dejado pasar una oportunidad única para el pueblo argentino al que le han robado millones de dolares.
Con un DNU Alberto Fernandez dio de baja el Decreto de Necesidad y Urgencia 522/2020 que autorizaba la intervención de Vicentin. Alberto tenía como "comodín" al gobernador Perotti que intentó "luchar" en el terreno del poder real: el poder judicial. Como es natural los ganadores son los de siempre, los dueños de Vicentin, y los perdedores igual puesto que en este mismo instante millones de dólares, producto de un préstamo ilegal del BNC, se encuentran en las bancas privadas de los dueños del campo.
El Coordinador Nacional y Miembro del Comité Central del PC, Jose Luis Livolti, dejó en claro cuales deben ser las actitudes de los revolucionarios frente a este acto de claudicación y derrotismo.
Es así comos se pierde una importante empresa que de haber estado en control Estatal hubiera sido el puntapié inicial para el control de sectores claves de la economía. En estos momentos el sector agropecuario -sector del que vive Argentina- se encuentra en manos de empresas como Cargill que no es más que una multinacional norteamericana.
Otra vez el sistema republicano burgués deja claro que la fracción de la burguesía, enemistada con el poder oligopolista, no tiene ni la fuerza ni las herramientas para hacerle frente al enemigo imperialista que domina al país en su totalidad.
La solución es un poder real, centralizado y poderoso capaz de aplicar medidas sin vacilar y libre de trabas burocráticas. Un poder depurado de la limitada burguesía que no hace más que atrasar. Se hace vital poder construir un poder revolucionario popular y anti imperialista que tenga la fuerza para independizar al país económicamente, es decir, independizarlo por última vez del imperio al que hoy Argentina se encuentra sometido. Acabar con el colonialismo que ya derrotamos una vez con un nuevo poder obrero y campesino.
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